¿Cómo puedo detectar si mi amigo o familiar está teniendo algún síntoma?
La familia y los amigos cumplen un papel fundamental durante toda la recuperación apoyando la persona que sufre el trastorno, ayudando a identificar cualquier problema que pueda estar provocando la medicación, advirtiendo cualquier síntoma de alama y acompañándole incluso en alguna visita al psiquiatra para poder añadir más información de cosas que quizás a él le pasen inadvertidas.
También constituyen un papel clave en las posibles recaídas; es importante saber reconocer los síntomas de alarma que en episodios previos han precedido a las descompensaciones, ya que nos indican que algo no va bien y si los comunicamos a tiempo, o bien acudiendo a su psiquiatra de referencia o llevándole a urgencias podemos evitar que se produzca finalmente el episodio.
¿Cuáles son los síntomas de alarma que debo observar cómo familiar?
No puede dormir o cambia los hábitos de sueño
Siento mucha tensión, ansiedad o miedo
Está muy irritable, inquieto/a
Se retrae, se aísla y no quiere ver a los amigos
Está triste, disfruta menos de las cosas y no le interesan
No tiene apetito o come a deshoras
Siente desconfianza, cree que los demás hablan mal de él/ella
Está haciendo algo, de repente se para y parece como si estuviera oyendo algo
No puede concentrarse y se preocupa en exceso por una o dos cosas
Cuando sale a la calle mira mucho a la gente, cree que le siguen
Su mirada ha cambiado
Sospecha que está tomando drogas
Los demás notan estos cambios en él/ella
¿Cómo me puedo poner en contacto con otros pacientes y dónde me pueden dar más información?
Existen Asociaciones de Pacientes en las que podrá compartir experiencias y obtener información. Además, las Asociaciones de Pacientes pueden ofrecer, también a familiares, apoyo psicológico y la oportunidad de participar en grupos de auto-ayuda.
A continuación les adjunto un test para descubrir si padeces dicha enfermedad:
Ya que aún no se conocen las causas de la esquizofrenia, los tratamientos se enfocan en tratar de eliminar los síntomas de la enfermedad. Los tratamientos incluyen medicamentos antipsicóticos y varios tratamientos psicosociales. Las investigaciones sobre la “atención especializada coordinada” han mostrado que este tipo de atención ofrece resultados prometedores para la recuperación. La atención especializada coordinada es cuando un administrador de casos, el paciente, y un equipo de profesionales en tratamientos farmacológicos y psicosociales trabajan juntos.
MEDICAMENTOS ANTIPSICÓTICOS
Los medicamentos antipsicóticos han estado disponibles desde mediados de la década de los cincuenta. Los más antiguos se llaman antipsicóticos convencionales o típicos.
En los años noventa, se desarrollaron nuevos medicamentos antipsicóticos. A estos nuevos medicamentos se les llama de segunda generación o antipsicóticos atípicos.
¿CUÁLES SON LOS EFECTOS SECUNDARIOS?
Algunas personas tienen efectos secundarios cuando comienzan a tomar medicamentos. La mayoría de los efectos secundarios desaparecen después de unos días. Otros son persistentes, pero a menudo se pueden controlar con éxito. Las personas que toman medicamentos antipsicóticos no deben manejar un vehículo hasta que se adapten a su nuevo medicamento. Los efectos secundarios de muchos antipsicóticos incluyen:
Somnolencia
Mareo al cambiar de posición
Visión borrosa
Latidos rápidos del corazón
Sensibilidad al sol
Erupciones en la piel
Problemas menstruales en las mujeres
Los antipsicóticos atípicos pueden hacer que una persona suba bastante de peso y cambiar su metabolismo, lo que podría aumentar el riesgo de desarrollar diabetes y colesterol alto. El médico debe vigilar regularmente el peso, los niveles de glucosa y los niveles de lípidos de una persona que toma medicamentos antipsicóticos atípicos.
Los antipsicóticos atípicos también pueden tener efectos secundarios relacionados con el movimiento físico, como:
Rigidez
Espasmos musculares persistentes
Temblores
Agitación
Utilizando la psicología en el tratamiento de un esquizofrénico:
¿Cuándo comienza la esquizofrenia y a quién le da?
La esquizofrenia afecta ligeramente a más hombres que mujeres. Ocurre en todos los grupos étnicos del mundo. Síntomas como las alucinaciones y los delirios suelen comenzar entre los 16 y 30 años de edad. Los hombres tienden a tener síntomas un poco antes que las mujeres. Por lo general, la esquizofrenia se presenta al final de la adolescencia y en la adultez temprana. Es poco común ser diagnosticado con esquizofrenia después de los 45 años. La esquizofrenia rara vez se da en los niños, pero cada vez se conoce más sobre casos de esquizofrenia que comienzan en la niñez.
A menudo es difícil diagnosticar la esquizofrenia en adolescentes. Esto se debe a que los primeros síntomas pueden incluir un cambio de amigos, bajas calificaciones, dificultad para dormir e irritabilidad; es decir, comportamientos que son comunes entre los adolescentes. Hay una combinación de factores que puede predecir la esquizofrenia en hasta un 80 por ciento de los jóvenes que tienen un alto riesgo de desarrollar la enfermedad. Estos factores incluyen el aislamiento y alejamiento de las personas, aumento en los pensamientos inusuales y en las sospechas o desconfianza, y un historial familiar de psicosis. Esta etapa pre-psicótica de la enfermedad se llama período “prodrómico.”
¿Las personas con esquizofrenia son violentas?
La mayoría de las personas con esquizofrenia no son violentas. De hecho, los crímenes más violentos no los realizan personas con esquizofrenia. Las personas con esquizofrenia tienen más probabilidad de hacerse daño a sí mismas que a otros. El abuso de drogas y otras sustancias puede aumentar la posibilidad de que la persona actúe violentamente. El riesgo de violencia aumenta cuando la psicosis no se trata y disminuye considerablemente cuando la persona está en tratamiento.
Les adjunto este video que contiene un caso de esquizofrenia:
SÍNTOMAS POSITIVOS
Los síntomas positivos son comportamientos psicóticos que generalmente no se ven en personas sanas. Las personas con síntomas positivos pueden “perder el contacto” con la realidad. En ciertas personas, estos síntomas van y vienen, mientras que en otras, se mantienen constantes. A veces son graves, mientras que otras veces apenas se notan. La gravedad de los síntomas positivos puede depender de si la persona está recibiendo tratamiento o no. Los síntomas positivos incluyen las alucinaciones, los delirios, los trastornos del pensamiento y los trastornos del movimiento.
Las alucinaciones son experiencias sensoriales producidas en la ausencia de un estímulo. Pueden ocurrir con cualquiera de los cinco sentidos (vista, oído, olfato, gusto o tacto). Las “voces”, o alucinaciones auditivas, son el tipo más común de alucinaciones en la esquizofrenia. Muchas personas con este trastorno oyen voces. Las voces pueden ser internas, es decir, que parecen venir de dentro de la mente de la persona, o pueden ser externas y parecer tan reales como si otra persona estuviera hablando. Estas voces pueden hablar con la persona sobre su comportamiento, ordenarle que haga cosas, o advertirle acerca de algún peligro. A veces las voces se hablan entre ellas y otras veces las personas con esquizofrenia hablan con las voces que escuchan. Las personas con esquizofrenia pueden haber estado escuchando estas voces por mucho tiempo antes de que sus familiares y amigos se den cuenta de que tienen este problema.
Otros tipos de alucinaciones incluyen ver personas u objetos que no están allí, oler cosas que nadie más huele o sentir cosas tales como dedos invisibles que les tocan cuando no hay nadie cerca.
Los delirios son creencias falsas que se mantienen firmemente a pesar de que no son consistentes con la cultura de la persona. Los delirios continúan incluso cuando hay evidencia de que no son verdaderos o lógicos. Las personas con esquizofrenia pueden tener delirios que parecen extraños, como creer que los vecinos pueden controlar su comportamiento con ondas magnéticas. También pueden creer que las personas que salen en la televisión les están dirigiendo mensajes especiales o que las estaciones de radio están transmitiendo sus pensamientos en voz alta a los demás.
Éstos son los llamados “delirios de referencia”. A veces creen que son otra persona, como un personaje histórico famoso. También pueden tener delirios paranoicos y creer que otras personas están tratando de hacerles daño, sea por engaño, acoso, envenenamiento, espionaje o que están conspirando contra ellos o contra las personas que quieren. Estas creencias se llaman “delirios de persecución”.
Los trastornos del pensamiento son maneras inusuales o disfuncionales de pensar. Una de esas formas se llama “pensamiento desorganizado”. Esto ocurre cuando una persona tiene dificultad para organizar sus pensamientos o para conectarlos lógicamente, y puede hablar de una manera confusa y difícil de entender (lo que a menudo se conoce como “ensalada de palabras”). Otra forma se llama “bloqueo de pensamiento” o simplemente “bloqueos”. Esto ocurre cuando una persona deja de hablar repentinamente en la mitad de lo que estaba diciendo. Cuando se le pregunta por qué dejó de hablar, puede decir que sentía como si la idea se había ido de su cabeza. Por último, una persona con un trastorno del pensamiento puede inventar palabras sin sentido o “neologismos”.
Los trastornos del movimiento pueden aparecer como movimientos agitados del cuerpo, algunos de los cuales se repiten una y otra vez. En el otro extremo, una persona con trastorno del movimiento puede llegar a ser catatónica. La catatonia es un estado en el cual una persona no se mueve y no responde a los demás. Hoy en día, la catatonia es rara, pero era más común cuando no existían tratamientos para la esquizofrenia.
SÍNTOMAS NEGATIVOS
Los síntomas negativos están asociados con la interrupción de las emociones y los comportamientos normales. Estos síntomas son más difíciles de reconocer como parte de la enfermedad y pueden confundirse con la depresión u otros problemas. Entre los síntomas negativos se encuentran:
“Afecto plano” (disminución en la expresión de emociones a través del rostro o tono de voz)
Falta de satisfacción en la vida diaria
Dificultad para comenzar y mantener actividades
Reducción del habla
Las personas con síntomas negativos pueden necesitar ayuda con sus tareas diarias. Pueden descuidar la higiene personal básica. Esto puede hacer que parezcan perezosos o que no quieren ayudarse a sí mismos, pero esos comportamientos son síntomas de la esquizofrenia.
SÍNTOMAS COGNITIVOS
Los síntomas cognitivos de la esquizofrenia son sutiles para algunas personas y más graves para otras. A veces los propios pacientes pueden notar cambios en su memoria u otros aspectos del pensamiento. Al igual que con los síntomas negativos, puede ser difícil reconocer que los síntomas cognitivos forman parte de este trastorno. Con frecuencia, solo se detectan cuando se realizan pruebas específicas. Los síntomas cognitivos incluyen:
Deficiencia en el “funcionamiento ejecutivo” (capacidad para comprender información y usarla para tomar decisiones)
Problemas para concentrarse o prestar atención
Problemas con la “memoria operativa”, también conocida como “memoria de trabajo” (capacidad para usar información inmediatamente después de haberla aprendido)
Una cognición disminuida se relaciona con peores resultados laborales y sociales, lo que puede causar angustia a las personas con esquizofrenia.
La esquizofrenia es un trastorno crónico y grave que afecta la forma de pensar, sentir y actuar de las personas. Aunque la esquizofrenia es menos común que otros trastornos mentales, puede ser sumamente incapacitante. Alrededor de 7 u 8 personas de cada 1,000 desarrollarán esquizofrenia en su vida.
Muchas veces, las personas con este trastorno escuchan o ven cosas que no están allí o piensan que los demás pueden leer su mente, controlar sus pensamientos o conspirar para hacerles daño. Esto puede aterrorizarlos y convertirlos en personas retraídas o extremadamente agitadas. También puede ser espantoso y molesto para las personas que los rodean.
Las personas con esquizofrenia a veces hablan de cosas extrañas o inusuales, lo que puede hacer difícil mantener una conversación con ellas. También pueden durar horas sentados sin hablar ni moverse. A veces las personas con esquizofrenia parecen estar perfectamente bien hasta que hablan de lo que realmente están pensando.
Las familias y la sociedad también se ven afectadas por la esquizofrenia. Muchas personas con este trastorno tienen dificultad para mantener un trabajo o cuidarse, lo que puede hacer que dependan de otros. El estigma en torno a la esquizofrenia es común, por lo que las personas con este trastorno a menudo prefieren no hablar sobre él, ni obtener el tratamiento adecuado.
Aunque las personas con esquizofrenia pueden tener síntomas durante toda su vida, el tratamiento ayuda a que muchas se recuperen y puedan perseguir sus metas en la vida. Usando nuevas técnicas de investigación para entender las causas de la esquizofrenia, los investigadores están desarrollando tratamientos más eficaces. En el futuro, estas investigaciones pueden ayudar a prevenir y tratar mejor la enfermedad.